Lengua 1º ESO C. Lengua.

Tareas para realizar durante la cuarentena.

A mano, con corrección ortográfica.

  1. Repaso y esquemas de las unidades ya vistas.
  2. Realización de reseñas, con el siguiente esquema: Resumen, Personajes y caracterización. Narrador (tipo). Tiempo y espacio. Subgénero narrativo a que pertenece; razónalo. Opinión argumentada sobre la lectura (10 líneas, mínimo).
  3. Redacciones de tema libre; tres, mínimo de 30 líneas, con las formas siguientes: Narrativa en primera persona. Narrativa, en tercera persona. Descriptiva objetiva. Descriptiva subjetiva.
  4. Repaso de la morfología explicada:
  5. Palabras variables/invariables.

Variables: nombre o sustantivo, adjetivo, determinante, pronombre, verbo.

Invariables: adverbio (tiempo, modo, cantidad, afirmación, negación), preposición y conjunción (enlazan).

  • Señálalas en el texto. Analízalas ( en negrita).
  • Lexema y morfema; análisis de las palabras en negrita del texto.
  • Repaso de sintaxis:
  • Sujeto y predicado.
  • Tipología de grupos; señala su tipo en estas oraciones:
  • Numerosas personas viajaron ayer en tren.
  • Ciertos se descuidaron de sus tareas.
  • Muchas películas se estrenaran pronto en los cines y en televisión.
  • Ayudad a vuestros semejantes  siempre con rapidez.
  • Releed las tareas realizadas ya completamente.

Texto

En un pequeño lugar de Aragón, y allá por los años de mil trescientos y pico, vivía retirado en su torre señorial un famoso caballero llamado don Dionís, el cual después de haber servido a su rey en la guerra contra infieles, descansaba a la sazón, entregado al alegre ejercicio de la caza, de las rudas fatigas de los combates.

Aconteció una vez a este caballero, hallándose en su favorita diversión acompañado de su hija, cuya belleza singular y extraordinaria blancura le habían granjeado el sobrenombre de la Azucena, que como se les entrase a más andar el día engalfados en perseguir a una res en el monte de su feudo, tuvo que acogerse durante las horas de la siesta, a una cañada por donde corría un riachuelo, saltando de roca en roca con un ruido manso y agradable.

Haría cosa de unas horas que don Dionís se encontraba en aquel delicioso lugar, recostado sobre la menuda grama a la sombra de una chopera, departiendo amigablemente con sus monteros sobre las peripecias del día, y refiriéndose unos a otros las aventuras más o menos curiosas que en su vida de cazadores les habían acontecido, cuando por lo alto de la empinada ladera y a través de los alternados murmullos del viento que agitaba las hojas de los árboles, comenzó a percibirse, cada vez más cerca. el sonido de una esquililla a las del guión de un rebaño.

En efecto, era así, pues a poco de haberse oído la esquililla empezaron a saltar por entre las apiñadas matas de cantueso y tomillo y a descender a la orilla opuesta del riachuelo, hasta unos cien corderos blancos como la nieve, detrás de los cuales, con su caperuza calada para libertarse la cabeza de los perpendiculares rayos del sol, y su hatillo al hombro en la punta de un palo, apareció el zagal que los conducía.

– A propósito de aventuras extraordinarias-exclamó al verle uno de los monteros de don Dionís, dirigiéndose a su señor, ahí tenéis a Esteban, el zagal que de un tiempo a esta parte anda más tonto que lo que naturalmente lo hizo Dios, que no es poco, y el cual puede haceros pasar un rato divertido refiriendo la causa de sus continuos sustos.

¿Pues qué le acontece a ese pobre diablo, inquirió don Dionís con aire de curiosidad picada?

  • Repaso ortográfico:
  • Puntuación.
  • Acentuación normativa, en diptongos, triptongos e hiatos.

Diptongos y triptongos siguen las normas generales.

Hiatos (cercanía de los vocales de sílabas distintas):

  1. Vocales abiertas (a, e, o). Siguen las normas de acentuación. León.
  2. Vocal abierta y cerrada (i, u): tilde sobre ésta última. María.
  3. Tilde diacrítica.

Señal colocada sobre ciertas palabras para diferenciarlas de otras, escritas igual pero de significado diferente:

Te-té

Se-sé

Si-Sí

  • Repaso de literatura:
  • Géneros literarios. Definición.
  • Subgéneros narrativos; tipología, diferencias y semejanzas. Obras (5 de cada tipo).
  • Lírica:
  • Definición.
  • Análisis métrico: cómputo silábico, rima y tipos, análisis.
  • Análisis métrico de estos fragmentos:
  • Rima IX
  • Besa el aura que gime blandamente
    las leves ondas que jugando riza;
    el sol besa a la nube en occidente
    y de púrpura y oro la matiza;
    la llama en derredor del tronco ardiente
    por besar a otra llama se desliza;
    y hasta el sauce, inclinándose a su peso,
    al río que le besa, vuelve un beso.
  • Rima X
  • Los invisibles átomos del aire
    en derredor palpitan y se inflaman;
    el cielo se deshace en rayos de oro;
    la tierra se estremece alborozada;
    oigo flotando en olas de armonía
    rumor de besos y batir de alas; mis párpados se cierran… ¿Qué sucede? –
    ¡Es el amor que pasa!
  • Rima XXI
  • ¿Qué es poesía?, dices, mientras clavas
    en mi pupila tu pupila azul,
    ¡Qué es poesía! ¿Y tú me lo preguntas?
    Poesía… eres tú.
    RIMA XXIII
    Por una mirada, un mundo;
    por una sonrisa, un cielo;
    por un beso… ¡Yo no sé
    qué te diera por un beso!
  • Rima XXX
  • Asomaba a sus ojos una lágrima
    y a mi labio una frase de perdón;
    habló el orgullo y se enjugo su llanto
    y la frase en mis labios expiró.
    Yo voy por un camino: ella, por otro;
    pero al pensar en nuestro mutuo amor,
    yo digo aún, ¿por qué callé aquel día?
    Y ella dirá, ,¿por qué no lloré yo?
  • Rima XXXVIII
  • Los suspiros son aire y van al aire.
    Las lágrimas son agua y van al mar.
    Dime, mujer, cuando el amor se olvida,
    ¿sabes tú adónde va?
  • Rima XLIV
  • Como en un libro abierto
    leo de tus pupilas en el fondo.
    ¿A qué fingir el labio
    risas que se desmienten con los ojos?
    ¡Llora! No te avergüences
    de confesar que me quisiste un poco.
    ¡Llora! Nadie nos mira.
    Ya ves; yo soy un hombre… y también lloro.
  • Rima LIII
  • Volverán las oscuras golondrinas
    en tu balcón sus nidos a colgar,
    y otra vez con el ala a sus cristales
    jugando llamarán.
    Pero aquellas que el vuelo refrenaban
    tu hermosura y mi dicha a contemplar,
    aquellas que aprendieron nuestros nombres…
    ¡esas… no volverán!.
  • Volverán las tupidas madreselvas
    de tu jardín las tapias a escalar,
    y otra vez a la tarde aún más hermosas
    sus flores se abrirán.
    Pero aquellas, cuajadas de rocío
    cuyas gotas mirábamos temblar
    y caer como lágrimas del día…
    ¡esas… no volverán!
  • Volverán del amor en tus oídos
    las palabras ardientes a sonar;
    tu corazón de su profundo sueño
    tal vez despertará.
    Pero mudo y absorto y de rodillas
    como se adora a Dios ante su altar, …
    como yo te he querido…; desengáñate,
    ¡así… no te querrán!